¿Cómo saber si tienes la córnea dañada y cómo tratarla?

¿Sospechas que algo no va bien en tu vista? Cuidado, podrías tener la córnea del ojo dañada. En este artículo de Clínica de Ojos Opeluce te contamos todo sobre esta afección, la forma correcta de identificarla y cómo puedes tratarla.

¿Qué es la córnea del ojo?

La córnea es la parte más externa del ojo, con forma abultada, que protege al iris y al cristalino de los peligros del exterior. Además, al ser un lente natural, permite que la luz viaje hasta la retina.

Por ello, es importante mantener su transparencia y curvatura exacta para que su funcionamiento sea el adecuado. Cuando algo en la córnea falla, se presentan signos como mayor sensibilidad a la luz o visión borrosa.

Síntomas de la córnea del ojo dañada

Una córnea dañada puede ser algo más común de lo que piensas, por lo que sus síntomas se manifiestan de distintas maneras. Entre los síntomas oculares más frecuentes se encuentran:

• Picazón en el ojo o dolor leve
• Visión borrosa
• Inusual sensibilidad a la luz
• Enrojecimiento del ojo
• Ojos llorosos o lagrimeo
• Espasmos oculares o la sensación de tener un cuerpo extraño en el ojo

Causas de la córnea dañada

Las causas de una córnea dañada están relacionadas con una alteración de la curvatura o la transparencia. Los fallos en esta composición pueden ser ocasionados por algunas de las siguientes razones:

Abrasión corneal

Una abrasión es una lesión ocular bastante común que puede afectar de distintas maneras a la córnea. Entre los síntomas más constantes provocados por una abrasión están el enrojecimiento ocular, la sensibilidad a la luz y un lagrimeo excesivo.

Una abrasión puede ir desde un raspón leve producido por la rama de un árbol, un papel o la uña de un dedo, hasta el hecho de clavarse un objeto en el ojo. Además, también puede ser provocado por salpicaduras de químicos como detergentes, productos de limpieza, etc. O por la filtración de polvo o arena dentro del ojo, más cuando reaccionas a ello frotando la zona con demasiada fuerza.

La sequedad ocular también puede generar una abrasión corneal. Esta enfermedad de la córnea puede provocar que tu vista se deshidrate mientras duermes, haciendo que los párpados casi se peguen a la córnea y que, al momento de despertar, se desprenda una pequeña parte del epitelio corneal.

Por otro lado, un mal uso o mal estado de los lentes de contacto también pueden provocar rasguños o lesiones en la córnea.

Laceración corneal

Una laceración es un corte en la córnea mucho más hondo que la abrasión y es muy dolorosa. Puede causar un daño total o parcial del tejido y, cuando el corte atraviesa toda la córnea, puede romper incluso el globo ocular.

La laceración casi siempre es provocada por un objeto punzocortante, un objeto afilado o algo que impacte con fuerza en el ojo. Para evitar esto, en actividades de riesgo para la vista es importante que siempre utilices gafas protectoras.

En caso de una laceración, no retires ningún objeto incrustado y acude de inmediato a emergencia oftalmológica.

Infecciones

Las infecciones oculares tienden a ser habituales en verano, más en ambientes de fácil propagación como lo son el agua de la piscina o de la playa. Son causadas por patógenos que pueden variar de tipo, como hongos, virus o bacterias.

Otras causas

Además de las causas ya mencionadas, las córneas también pueden dañarse por otros motivos. Estos son:

• Una prolongada exposición sin la debida protección a los rayos del sol.
• Habitar en espacios muy secos, sean estos por el clima, aire acondicionado o calefacción.
• Por cuerpos extraños que irrumpen en el ojo, causando irritación, malestar, entre otros problemas.

Si has notado cualquiera de los síntomas mencionados en tu visión, debes acudir de inmediato con un oftalmólogo para realizarte un examen de la vista completo.

Tratamiento para la córnea del ojo dañada

Según la forma y la gravedad en cómo la córnea ha sido dañada pueden presentarse dos tipos de tratamiento distintos:

En caso de que la córnea haya sido dañada por un objeto extraño, lo recomendable es acudir a emergencias de inmediato. Ahora, si el daño es por una sustancia química, lo prioritario es enjuagar los ojos con bastante agua o una solución salina estéril para detener la lesión química. Acto seguido, debes acudir a emergencias para recibir atención médica.

Los tratamientos para una córnea dañada pueden ser gotas oftalmológicas bajo prescripción médica, cuyo tipo dependerá del caso en particular; uso de un parche diseñado específicamente para proteger el ojo; medicamentos analgésicos para el dolor; o, en los casos más graves; una operación de trasplante de córnea.

¿Cómo prevenir una lesión en la córnea?

Evitar una lesión en la córnea es posible siguiendo estas recomendaciones:

• Usa gafas de seguridad al momento de manipular máquinas que generen astillas. También es recomendable usarlas en deportes extremos o de contacto.
• Usa gafas con filtro ultra violeta frente a la exposición solar.
• Ten precaución en el uso y manipulación de lentes de contacto.
• En caso de tener síndrome del ojo seco, visita periódicamente al médico para evitar complicaciones en la córnea.

Cuidar la salud de tus ojos es muy importante para tu día a día, ¡no la descuides! Recuerda que si presentas alguna afección crónica o sientes dolor, ardor, enrojecimiento, lagrimeo constante o visión borrosa, son signos de alerta que indican que algo no va bien con tu salud visual.

Solicita una consulta en la sub especialidad de Córnea de Clínica de Ojos Opeluce y obtén una atención de calidad oportuna. También puedes contactarnos a través del chat de WhatsApp.