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Cuando un agente extraño ingresa al globo ocular, éste produce lágrimas para eliminarlo. Una vez que el problema se resuelve, los ojos dejan de lagrimear. Sin embargo, existen problemas oculares y de salud que ocasionan lágrimas constantes, un fenómeno también conocido como epífora ocular u ojos llorosos. Hoy en el artículo que Clínica de Ojos D’ Opeluce ha preparado para ti conocerás cuáles son las posibles causas que generan los ojos llorosos y cuándo debes acudir a un médico para un diagnóstico y tratamiento personalizado.
Ojos llorosos: Patologías asociadas
Existen algunas afecciones oculares que pueden estar asociadas al lagrimeo en los ojos o epífora ocular, entre las más frecuentes es posible mencionar:
1. Ojo seco
Parece contradictorio, pero el ojo seco es la primera causa de los ojos llorosos. Puedes tener este problema porque tu cuerpo no produce suficientes lágrimas, se secan demasiado rápido o porque no tienen el equilibrio adecuado de agua, aceites y mucosidad. Estos desórdenes oculares pueden ocurrir por muchas causas, desde días ventosos hasta condiciones médicas. Cualquiera que sea la causa, tus ojos reaccionan haciendo más lágrimas, pero con baja capacidad de lubricación.
2. Conjuntivitis
La conjuntivitis hace que los ojos se vean rosados o rojos y se sientan con arena y picor. Esta afección es una infección ocasionada por bacterias o virus. La infección viral no necesita tratamiento, pero si el médico te diagnostica con conjuntivitis bacteriana podría recomendarte unas gotas oculares antibióticas. Los pacientes con esta enfermedad de la vista sufren de lagrimeo constante en los ojos.
3. Alergias
Si tienes ojos llorosos y picazón, además de tos, secreción nasal y otros síntomas clásicos de la alergia, posiblemente el lagrimeo en los ojos sea consecuencia de una reacción alérgica. Sin embargo, es posible tener solo alergias oculares y quejarse de picazón o sensación de sequedad.
Para tratar las alergias de la vista se recetan gotas y se recomienda al paciente evitar desencadenantes, como el polen, el moho o el pelaje de las mascotas. Las reacciones alérgicas pueden confundirse con resfriados, que también causan ojos llorosos en forma aguda, pero estos no provocan comezón en la vista.
4. Conducto lagrimal bloqueado
Normalmente, las lágrimas salen de las glándulas lagrimales que se ubican en la parte superior externa del ojo. De ahí, se mueven por el conducto que permite su paso a través de la superficie del globo ocular hasta drenarse por el canal naso-lagrimal.
Sin embargo, si los conductos se obstruyen, las lágrimas se acumulan y el ojo se pone lloroso. Muchos factores pueden causar este problema: infecciones, lesiones e incluso el envejecimiento.
5. Problemas con los párpados
Tus párpados son como limpiaparabrisas, cuando parpadeas, esparcen lágrimas por todo el ojo y eliminan la humedad adicional, pero a veces no funcionan adecuadamente. Los párpados y las pestañas pueden curvarse hacia adentro y rozar contra el ojo, generando un problema denominado entropión o se caen hacia afuera, ocasionando una condición conocida como ectropión.
Si sufres de cualquiera de estas condiciones los párpados no pueden limpiar la vista cuando parpadeas y provocan ojos llorosos. La cirugía es el procedimiento más recomendado para resolver estos problemas.
6. Abrasión de la córnea o rasguño en el ojo
La suciedad, la arena y el uso inadecuado de los lentes de contacto pueden raspar la parte externa del globo ocular o córnea. Si esto sucede, el ojo podría lagrimear, doler, verse rojo y ser sensible a la luz. Aunque estos arañazos suelen curarse en un día o dos, es importante que consultes al médico si tienes alguna lesión porque es posible que necesites tratamiento para prevenir una infección o exámenes oftalmológicos especiales.
7. Orzuelo
El orzuelo puede hacer que se desarrolle un lagrimeo ocular constante, pero presenta otros síntomas más obvios, como un bulto rojo y doloroso a lo largo del borde del párpado. La causa de esta condición son las bacterias.
El orzuelo probablemente desaparecerá por sí solo en unos pocos días. Mientras tanto, evita manipularlo y no trates de reventarlo como si fuera una espinilla, ya que propagarás la infección. Los paños tibios sobre el ojo alivian el dolor.
8. Problemas de pestañas
¿Alguna vez has tenido un vello en las cejas que crece en un ángulo extraño? Lo mismo puede suceder con tus pestañas. Si crecen hacia adentro en lugar de hacia afuera, chocan contra el ojo y este fenómeno se llama triquiasis. Puede ocurrir después de infecciones, lesiones u otros problemas. Para aliviar la incomodidad y el exceso de lágrimas en los ojos, el médico podría remover la pestaña o redirigirla para que apunte en la dirección correcta.
9. Blefaritis
Esta condición hace que los párpados se hinchen, generalmente cerca de las pestañas. Los ojos pueden arder, picar, estar llorosos y rojos. Muchos elementos pueden causar esta afección ocular, por ejemplo infecciones, rosácea y alergias. Los tratamientos farmacológicos pueden ayudar, aunque la blefaritis a menudo aparece y desaparece.
10. Problemas con las glándulas sebáceas
Las glándulas diminutas en el borde del párpado, llamadas glándulas meibomianas, producen aceites que son parte de las lágrimas y ayudan a mantener los ojos sanos, evitando que se sequen demasiado rápido. Además crean una barrera que mantiene las lágrimas donde se necesitan.
Pero si estas glándulas se obstruyen y no producen suficiente aceite, el ojo se irrita y se pone lloroso. Colocar compresas calientes sobre el ojo es una forma de ayudar a que las glándulas funcionen con normalidad.
Otras afecciones que provocan ojos llorosos
Existen otras condiciones médicas que causan ojos llorosos, entre ellas se pueden mencionar: La parálisis de Bell, el síndrome de Sjogren, infecciones crónicas de los senos paranasales, problemas de tiroides y artritis reumatoide. También los tratamientos médicos como la quimioterapia o la radiación pueden ocasionar lagrimeo en los ojos.
Si tus ojos lloran con frecuencia y no sabes por qué, consulta a tu médico. El tratamiento puede hacer que te sientas mejor y te ayudará a ver con claridad. Si deseas mayor información sobre nuestras consultas, cirugías oculares o los servicios que ofrecemos, comunícate a través de nuestro formulario de contacto o reserva una cita.
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