¿Tienes el conducto lagrimal obstruído? La Dacriocistorrinostomía puede ser la solución ideal para ti
La dacriocistorrinostomía, es una intervención quirúrgica cuyo propósito es adaptar un conducto lagrimal alternativo en pacientes diagnosticados con obstrucción de las vías lagrimales. A continuación, descubrirás en qué consiste ésta intervención, cuándo está recomendada, por qué se practica y cuáles son las recomendaciones tras la cirugía oftalmológica.
La dacriocistorrinostomía funciona como una alternativa para tratar la obstrucción del conducto lagrimal. Se utilizan tejidos provenientes del cuerpo del paciente para desarrollar una especie de drenaje, e implantarlo para normalizar el paso desde el saco lagrimal hacia las fosas nasales.
Este procedimiento oftalmológico, permite que las lágrimas realicen su recorrido habitual y al mismo tiempo, evita que se desborden por lo que el lagrimeo constante cesa. Asimismo, se trata de una intervención ambulatoria; por tanto, el paciente estará de alta en menos de 24 horas. No obstante, será necesario colocar anestesia local y sedantes.
La obstrucción del conducto lagrimal tiene diversas causas asociadas dependiendo de la edad. Por ejemplo, en recién nacidos, lo más probable es que sea una condición congénita y generalmente, desaparece de forma natural antes del primer año del bebé. En cambio, en adultos el bloqueo lagrimal puede estar asociado a tumores, procesos infecciosos o lesiones.
En general, el mal funcionamiento del conducto lagrimal incrementa el riesgo de desarrollar virus, hongos o bacterias en el área ocular, lo que puede manifestarse con diversos síntomas como inflamación en el ojo o infecciones frecuentes. En este caso, es importante mencionar que, cualquier área alrededor del sistema de drenaje ocular puede sufrir infecciones o inflamaciones debido a la obstrucción lagrimal.
Existen tres tipos de Dacriocistorrinostomía, dependiendo del método que se utilice para practicarla, y del caso particular del paciente. Estos son:
Interna o endonasal: Se utiliza la endoscopia por vía nasal, sin necesidad de realizar incisiones a nivel de piel. Al mismo tiempo, es una alternativa que se aplica en casos de aspergiloma, sinusitis o pólipos, con resultados excelentes.
Láser: Se aplica una ráfaga de impactos láser, utilizando una fibra óptica que permanece haciendo contacto con la cara interna del conducto lagrimal. Su propósito es crear un nuevo drenaje, sin dejar marcas visibles.
Externa: Se aplica cuando la Dacriocistorrinostomía láser no es efectiva, y se realiza a través de la piel ubicada en la parte baja de la nariz.
En resumen, si presentas lagrimeo constante, y quieres erradicar esta molesta situación, asiste a consulta oftalmológica y permite que los expertos de Clínica de Ojos D' Opeluce, determinen cuál es la mejor alternativa para ti.