Catarata Senil

La  catarata senil es una condición ocular que se manifiesta durante el proceso de envejecimiento, y se caracteriza por la aparición de un velo sobre el cristalino del ojo. Descubre cuáles son sus causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento en este  artículo.

¿Qué es la catarata senil?

Una catarata senil es la pérdida de claridad en el lente natural del ojo, o cristalino, que se localiza detrás de la pupila y está encargado de dirigir los rayos de luz hasta el área de la retina, para que el ojo humano pueda reproducir las imágenes. 

Sin embargo, cuando aparece el velo o la falta de transparencia en el cristalino, es imposible que se produzca el paso de la luz hacia la retina y por tanto, la persona que padece esta condición pierde la capacidad visual poco a poco.

Causas de la catarata senil

Entre las causas más comunes de la cataratas senil, se encuentra el proceso de envejecimiento, pues el cristalino comienza a perder su transparencia. Asimismo, existen otros factores que pueden incidir en la aparición de la catarata senil.

• Afecciones oculares degenerativas, como la retinitis pigmentaria.

• Los antecedentes familiares de catarata senil pueden causar el desarrollo, a largo plazo, de esta condición ocular.

• Tumores intraoculares.

• Los pacientes con traumas oculares tienen más riesgo de desarrollar catarata senil.

• Exposición constante a la luz ultravioleta o a la radiación solar.

• Abuso de corticoides.

• Alcoholismo o tabaquismo.

• Inflamación del globo ocular (Uveítis).

Síntomas de la catarata senil

Entre las señales más frecuentes de catarata senil, se encuentran:

• Diplopía o visión doble.

• Visibilidad limitada o nublada.

• Incapacidad de percibir los colores con nitidez.

• Percepción de destellos al ver la luz.

• Sensibilidad al exceso de luz o deslumbramiento.

Diagnóstico y tratamiento de la catarata senil

Para diagnosticar la presencia de una catarata senil, es necesario investigar cuál es la causa asociada a esta condición en el paciente, solicita tu cita aquí. En este sentido, identificar la existencia de enfermedades sistémicas, traumas oculares previos, el abuso de fármacos u otras enfermedades oculares, es indispensable. De esta manera, el oftalmólogo podrá saber si la disminución de la capacidad visual está asociada a la presencia de la catarata senil, y la operación de cataratas es la solución.